Las celebraciones del Día Mundial de la Astronomía se extienden toda esta semana en Chile, país sudamericano que aloja a los observatorios más importantes del mundo gracias a sus condiciones propicias para observar el cielo.
La ministra chilena de Ciencia, Aisén Etcheverry, afirmó el pasado domingo que el Día Mundial de la Astronomía, que se celebra el 21 de marzo, es una de las oportunidades que tiene Chile para poner en valor el potencial de los chilenos.
“Y de motivar tanto la curiosidad como el pensamiento crítico en las nuevas generaciones, para que a través del conocimiento y el pensamiento crítico, descubran que materias como la física y las matemáticas son una forma de entender de dónde venimos y hacia dónde vamos, no solo números en sus cuadernos”, afirmó.
Etcheverry subrayó que Chile es un país de astrónomos y científicos y eso es algo de lo que “tenemos que sentir orgullo”.
“Desde Chile, y con investigadores e investigadoras chilenas, hemos podido ver el pasado, conocer la historia y proyectar el futuro. Nos han dado una posibilidad de crecimiento y desarrollo científico como país”, agregó.
En tanto, el Planetario de la Universidad de Santiago (Usach) que funciona como centro audiovisual de difusión astronómica, uno de los más importantes de la región, también celebró el martes el Día Mundial de la Astronomía.
El representante en Chile de la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO), Luis Chavarría, señaló en el evento que “el Día de la Astronomía es algo clave, que tiene que ocurrir en Chile, debido a la gran cantidad de observatorios astronómicos que están en Chile desde ya hace 60 años. No puede pasar desapercibida la importancia de esta ciencia para el país entero”.
“Además, del aniversario de los 60 años de ESO como institución. Ya dos de los proyectos en los cuales estamos involucrados, que son los más grandes del mundo en su propia área, que son ALMA (Atacama Large Millimeter/Submillimeter Array), que cumple 10 años, y VLT (Very Large Telescope) de Paranal, que cumple 25 años”, explicó.
Chavarría destacó que el “Extremely Large Telescope” (ELT) de ESO, el telescopio óptico más grande del mundo, terminará de construirse en 2028.
ELT está instalado en el Cerro Armazones, a unos 3.000 metros sobre el nivel del mar en el desierto de Atacama y cercano al observatorio Paranal, todo en la región chilena de Antofagasta (norte).
“Estos proyectos son larguísimos, desde que se pensó la idea del ELT hasta que va a estar construido van a pasar más de dos décadas y eso es normal.
Pero también es un llamado de atención para darse cuenta de la cantidad de tiempo en que ocurren y cómo poder involucrarse en estas empresas de gran infraestructura para la ciencia”, complementó Chavarría.
Este mes, también el observatorio ALMA cumplió 10 años desde su instalación en el desierto chileno de Atacama, a más de 5.000 metros de altura sobre el nivel del mar.
Sus 66 antenas conforman el observatorio astronómico más grande y a mayor altura del planeta, que nació gracias a la cooperación internacional científica.
“Es muy simbólico todo lo que ocurre este año en Chile con respecto a nuestra institución y el desarrollo de astronomía de distinto tipo”, remarcó el representante de ESO en Chile.
A su vez, la directora ejecutiva del Planetario de la Usach, Jacqueline Morey Compagnon, aseveró que desde una mirada retrospectiva el Día Mundial de la Astronomía ha sido un trabajo valioso de divulgación.
“Pero también de poner en valor lo que se hace en astronomía en nuestro país y desde ese punto de vista creemos que es importante celebrar, como forma de sacar al científico del laboratorio y del observatorio, puesto que tenemos un desarrollo económico que estará ligado al desarrollo de esta área”, destacó.
Con información de Xinhua