Según el sociólogo y analista Agustín Burbano de Lara, estamos viviendo uno de los procesos electorales más polarizados de los últimos años, en el que las distintas tendencias, a excepción de la oficialista y la Revolución Ciudadana, no tienen protagonismo en la conversación pública, lo que se ve reflejado también en las cifras.
Impresiones del debate
Burbano de Lara sostiene que las fuerzas políticas (oficialistas y de izquierda) que están ganando mayor protagonismo en estas elecciones deben capitalizar los temas planteados en el debate para posicionarse e influir en el electorado indeciso.
En ese sentido, el movimiento Revolución Ciudadana tiene ventaja debido a la ausencia de la candidata del oficialismo
En su análisis post debate resalta algunas particularidades:
- La importancia de la presencia de una mujer en la papeleta de presidenciables al contrario de las otras tendencias que le dieron un lugar subalterno.
- La falta de dominio del tema seguridad tanto por parte de los interpelantes como de ciertas candidaturas vicepresidenciales a excepción del candidato Diego Borja.
- La poca o carente falta de mención al Sistema de Justicia a pesar de su importancia.
Burbano de Lara afirma que el Ecuador tiene un problema de seguridad desde el incumplimiento del expresidente Lenin Moreno a la Ley Orgánica de Seguridad Pública del Estado que demanda la presencia de una instancia coordinadora de seguridad la misma que fue eliminada vía decreto ejecutivo.
Manifiesta que las propuestas de la mayoría de candidatas no reflejaron la «imagen estratégica, sistemática y articulada» que tiene un sistema complejo como el de seguridad y que el único candidato que hizo referencia a aquello fue Diego Borja al mencionar «la importancia de tener inteligencia tributaria, potenciar la Senain, y logró dimensionar la multiplicidad de aristas que un sistema nacional de seguridad debe tener».
Burbano de Lara sostiene que el problema de inseguridad que vive el país, el irrespeto a las leyes en todos los ámbitos, últimamente en el electoral por parte del candidato presidente, se solucionará con una verdadera reforma y depuración de la justicia que actualmente no sanciona a aquellos que la incumplen.
«Daniel Noboa no está solo»
Si analizamos a profundidad esta frase, se podrá demostrar, afirma el sociólogo, que existen ciertas élites, holdings empresariales, medios de comunicación tradicionales y alternativos y organismos e instituciones de control que se benefician económica y políticamente de las violaciones reiterativas que hace el candidato presidente a la Constitución y la norma.
Una evidencia de aquella afirmación es la ausencia de la candidata del oficialismo en el debate, lo que demuestra que esta organización política «no se toma en serio las infracciones electorales ni la normativa electoral», que no tienen una relación saludable con la ley porque la acata cuando le es favorable y la irrespeta cuando no, cuando atenta a sus intereses personales sostiene.
Pero esta ausencia también pone en evidencia que existe un real menoscabo a la figura presidencial por parte de Daniel Noboa y hay una «complicidad grotesca» de ciertos medios de comunicación y organismos de control que se alinean a esta política oficial.
«Hay un sector muy importante de las élites de este país que se beneficia del lavado de dinero de economías clandestinas en el sistema financiero, porque no implementan las medidas del GAFI para limpiarlo… Saben que la justicia está infiltrada por el crimen organizado, pero no quieren hacer nada porque ese sistema judicial les sirve para que persiga a la Revolución Ciudadana, y garantizar que este movimiento no vuelva a gobernar».
Burbano de Lara también se refiere a las entidades de control y a la fuerza pública, afirmando que «en un estado de derecho, el lugar donde deben resolverse, en última instancia, los conflictos es la Corte Constitucional y no con comunicados de las Fuerzas Armadas».
Finalmente, con estos ejemplos, Burbano de Lara manifiesta que no es solo el candidato presidencial quien irrespeta las normas.
Las personas naturales y jurídicas que están involucradas también lo permiten porque no quieren dejar de gobernar el país. «Tienen miedo de que la Revolución Ciudadana gobierne nuevamente, porque en su periodo el Estado no era una hacienda, y porque en ese tiempo no pudieron cumplir sus expectativas y deseos a corto plazo».
«Le temen a un proyecto político que reconstruya un Estado con relativa autonomía, que ponga el bienestar social por encima del particular», enfatizó.