08JUL23.- El avance hacia la integración energética y la búsqueda de una mayor seguridad y eficiencia en el suministro eléctrico han llevado a Ecuador y Perú a embarcarse en un ambicioso proyecto de interconexión eléctrica.
En rueda de prensa, el ministro de Energía y Minas de Ecuador, Fernando Santos, junto al Gerente de la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC EP), Gonzalo Uquillas, compartieron los detalles sobre el inicio del procedimiento precontractual para obtener líneas de crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI), necesarias para financiar la construcción de esta importante infraestructura.
El proyecto de interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú consistirá en la construcción de una línea de transmisión de 500 kilovoltios (kV) que abarcará aproximadamente 550 kilómetros entre ambos países. La inversión total para este proyecto se estima en alrededor de USD 289 millones, de los cuales el BID y el BEI contribuirán con USD 125 millones cada uno, mientras que el resto será financiado con recursos propios de CELEC EP.
Gonzalo Uquillas, gerente general de CELEC EP, manifestó su expectativa de firmar el crédito con el BID en julio y con el BEI en agosto, una vez sea aprobado en una junta directiva programada para el 12 de julio. Por su parte, se espera que la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Proinversión) de Perú pueda adjudicar las obras correspondientes en el lado peruano a finales de julio. En Ecuador, se prevé que la adjudicación de las obras se realice en octubre de 2024, con la meta de concluir las mismas en el primer semestre de 2027.
Una vez completadas, estas obras permitirán establecer una “súper autopista eléctrica” de 800 kilómetros a 500.000 voltios desde la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la más grande de Ecuador con una capacidad de 1.500 megavatios, hasta la frontera con Perú. El trazado de esta línea de transmisión atravesará las provincias de Guayas y El Oro y comprenderá cuatro fases principales: la línea de transmisión Chorrillos-Pasaje de 500 mil voltios, con una extensión de 207 kilómetros; la ampliación de la subestación Chorrillos con una bahía de línea de 500 mil voltios; la construcción de una nueva subestación eléctrica en Pasaje (El Oro) de 500/230 mil voltios y capacidad de 600 MVA; y la línea de transmisión Pasaje-Frontera de 500 mil voltios, con una longitud de 77 kilómetros.
Uno de los aspectos destacados por Gonzalo Uquillas fue la complementariedad de las matrices eléctricas de Ecuador y Perú, lo que permitirá un intercambio energético beneficioso para ambos países. Mientras que la matriz de Perú cuenta con una fuerte presencia de gas natural, la matriz de Ecuador se basa principalmente en la hidroelectricidad. Esto crea un escenario propicio para la interconexión, ya que la generación de excedentes energéticos en un país puede ser aprovechada por el otro, mejorando así la seguridad y diversificación del suministro eléctrico en la región.
El gerente general de CELEC EP subrayó que el 94,7 % de la demanda eléctrica de Ecuador se abastece de fuentes renovables como la hidroeléctrica y la eólica. Esta conexión con Perú no solo fortalecerá la interconexión eléctrica en la región, sino que también abrirá nuevas oportunidades de exportación de energía. CELEC reportó que, entre febrero y mayo, Ecuador exportó más de 180.000 megavatios a Colombia, mientras que las ventas a Perú a través de la conexión radial existente fueron de 2.117 megavatios. La nueva línea de interconexión permitirá un aumento significativo en la capacidad de transmisión, facilitando el intercambio de grandes volúmenes de electricidad y generando ingresos para Ecuador.
La cristalización de esta vía de interconexión eléctrica es posible gracias a los excedentes energéticos que Ecuador ha experimentado, especialmente a partir de la entrada en funcionamiento de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair en 2016. Esto ha otorgado al país una soberanía energética, al garantizar un suministro suficiente, constante y a precios competitivos. Además, la generación renovable representa aproximadamente el 90% de la energía producida en Ecuador, lo que demuestra el compromiso con la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.
Desde la puesta en marcha de Coca Codo Sinclair, Ecuador ha experimentado una transformación en su matriz energética. Esta central hidroeléctrica, con una potencia de 1.500 megavatios, se ha convertido en un pilar fundamental en la generación de energía del país. Su entrada en operación ha brindado a Ecuador una mayor autonomía energética y ha sentado las bases para la exportación de energía hacia otros países de la región que adía de hoy se consolida de mejor manera.
La inversión del proyecto requiere cerca de USD 289 millones, de los cuales, el BID Banco Interamericano de Desarrollo concederá USD 125 millones, el BEI (Banco Europeo de Inversiones) USD 125 millones y la diferencia será gestionada con recursos propios de CELEC EP. Este costó cubrirá 550 kilómetros necesarios entre ambas naciones.
La construcción de la línea de interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú representa un paso estratégico para aprovechar al máximo la capacidad de generación de energía de Coca Codo Sinclair y otros proyectos hidroeléctricos del país. A través de esta conexión, Ecuador podrá exportar el exceso de energía generada por sus fuentes renovables, como la hidroeléctrica y la eólica, a Perú y otras naciones vecinas. Esto abrirá nuevas oportunidades económicas y fortalecerá la posición de Ecuador como exportador de energía.
La exportación de energía eléctrica representa un impulso significativo para la economía de Ecuador. Al poder vender el excedente de energía generada, el país podrá diversificar sus fuentes de ingresos y reducir su dependencia de la exportación de otros recursos naturales. Esto contribuirá a un crecimiento económico más sólido y sostenible, al tiempo que fortalecerá la balanza comercial del país y generará empleo en el sector energético.
Además de los beneficios económicos, la interconexión eléctrica con Perú fortalecerá la seguridad energética de Ecuador. Al estar conectado a una red de interconexión regional, el país podrá contar con respaldos y garantizar un suministro eléctrico confiable y estable. Esto reducirá la vulnerabilidad ante posibles fluctuaciones en la demanda interna y mejorará la calidad de vida de los ciudadanos ecuatorianos al contar con un suministro de energía más seguro y estable.
Asimismo, la interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú fomentará la cooperación y el intercambio de conocimientos en el sector energético. Ambos países podrán compartir experiencias y buenas prácticas, lo que contribuirá al desarrollo conjunto y a la adopción de tecnologías más eficientes y sostenibles. Esto abrirá nuevas oportunidades para la innovación y el avance tecnológico en el sector energético de ambas naciones.
Es importante destacar que la interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú es un proyecto de largo plazo que requiere de una planificación cuidadosa y una ejecución eficiente. La construcción de la infraestructura necesaria, incluyendo la expansión de subestaciones y la implementación de nuevos sistemas de transmisión, representa un desafío técnico considerable. Sin embargo, los beneficios a largo plazo superan ampliamente los desafíos iniciales.
En conclusión, la construcción de la nueva línea eléctrica de interconexión entre Ecuador y Perú representa un hito importante en el desarrollo del sector energético de ambos países. Esta iniciativa, impulsada por la entrada en funcionamiento de Coca Codo Sinclair, brinda a Ecuador la oportunidad de exportar energía y diversificar su economía. Además, fortalecerá la seguridad energética del país y fomentará la cooperación regional en el sector energético. La interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú es un paso crucial hacia un futuro energético más sostenible y próspero para Ecuador, aprovechando al máximo sus recursos renovables y fortaleciendo su posición como actor clave en la región.
Informa Ecuador