El especialista político Ramiro Aguilar, en entrevista con el programa Los Especialistas de Ecuador en Directo, analizó la importancia de que la ciudadanía y los movimientos progresistas brinden su apoyo firme a la candidatura de Luisa González y Diego Borja, con el fin de construir una agenda de país que enfrente la crisis multidimensional que atraviesan los ecuatorianos desde los gobiernos de Moreno, Lasso y Noboa.
Lo que se define en esta segunda vuelta
Según el analista, en esta segunda vuelta electoral existen muy pocos votos por decidirse entre los dos candidatos. En primer lugar, Noboa, con los votos de Andrea González, podría alcanzar un máximo apoyo del 48% en comparación con la primera vuelta. Por otro lado, Luisa González, quien ya superó su techo del 38% y alcanzó un 44%, aún tiene potencial de crecimiento, aunque el margen de votación para definir al ganador es estrecho, rondando entre el 3% y el 3.5%, según Aguilar.
Para que Luisa González alcance ese máximo de porcentaje, el analista sostiene que la ciudadanía y los movimientos progresistas, ya cansados de la pésima gestión de Noboa, deben votar por el binomio de la Revolución Ciudadana. Según Aguilar, la falta de propuestas concretas de Noboa y su tendencia a perseguir a sus opositores en lugar de ofrecer soluciones, hacen urgente un cambio hacia un proyecto progresista.
La importancia del apoyo de Pachakutik y la Conaie
En este escenario, la posición de Pachakutik y la Conaie juega un papel crucial. Si bien dentro de estos movimientos existe una facción de derecha que ya apoyó a Noboa, también hay un sector progresista que se ha pronunciado a favor de Luisa González. Este respaldo es de gran relevancia.
Sin embargo, para Aguilar, hay un elemento esencial: el país debe estar preparado para reconocer la legitimidad de los resultados. Según el analista, esta disposición democrática se observa más en la Revolución Ciudadana que en el movimiento oficialista. Por eso, resalta la necesidad de lograr un apoyo que asegure un margen superior al 3% o 3.5%.
“El resultado va a ser muy cerrado, pero la democracia ecuatoriana debe estar lo suficientemente sana y sólida para respetarlo”, afirma el analista. En este sentido, hace un llamado al pueblo ecuatoriano a defender el camino de la unidad y de un proyecto político que encamine al Ecuador hacia una realidad distinta. Reafirma que los ecuatorianos deben defender su voto con la misma valentía con la que han defendido la soberanía y los recursos del país.
“Los ecuatorianos que hacen control electoral deben hacerlo con más valor y valentía, porque el resultado será muy estrecho y cada voto cuenta”, enfatiza Aguilar, en un contexto donde el Consejo Nacional Electoral ha emitido una resolución que prohíbe el uso de celulares durante la jornada electoral del próximo 13 de abril.
Noboa: Un mal presidente y un mal candidato
Para el analista político, es fundamental el triunfo de Luisa González y Diego Borja, ya que Daniel Noboa no tiene un portafolio político que ofrecer al electorado. Según Aguilar, no puede presentar una gestión que lo respalde para una posible reelección, porque su administración ha sido deficiente y su campaña carece de propuestas sólidas.
“Sus ofrecimientos de campaña generan desconfianza, ya que la gente se pregunta por qué no ha hecho lo que promete, a pesar de haber tenido un año para hacerlo”, explica Aguilar. Este, según él, es el precio más alto que Noboa está pagando como candidato.
“Un candidato que se plantea la reelección tiene un portafolio de gestión pública que puede ofrecerle al electorado como garantía de que su administración será mejor. Pero con Noboa, esto no es posible”, afirma Aguilar.
Aguilar añade que Noboa ha robado la esperanza de los ecuatorianos de un futuro mejor, especialmente la de los jóvenes que querían quedarse en el país, y la de los millones de electores que votaron por él en 2023, pensando que era una alternativa, pero que, hasta ahora, ha demostrado ser un gobierno peor que el de Guillermo Lasso.
La Fiscalía y la campaña de Noboa
El analista señala que, debido a la incapacidad de Noboa para gobernar, ha decidido utilizar a la Fiscal Diana Salazar como herramienta de campaña. Según Aguilar, la Fiscalía ha actuado con agresividad, intentando beneficiar a Noboa mientras él se dedica a su exposición en redes sociales, tratando de convencer a los jóvenes electores, que también están cansados de la falta de gestión del candidato-presidente.
“La Fiscalía no es la única vocera de esta campaña, también lo son los ministros, aunque en menor medida. Ellos intentan lavar la imagen de un presidente-candidato incapaz de responder ante las necesidades del pueblo”, explica Aguilar.
El analista critica la presencia de la Fiscalía en esta segunda vuelta electoral, especialmente con el fiscal subrogante, ya que la figura de Diana Salazar tiene una percepción muy negativa en la opinión pública. Según Aguilar, la Fiscalía ha intentado reactivar casos que podrían afectar la imagen de la Revolución Ciudadana y, por ende, la de Luisa González, pero estos esfuerzos no han tenido el efecto esperado.
En cuanto al caso de la reconstrucción de Manabí, Aguilar sostiene que, a pesar de los esfuerzos del fiscal subrogante para demostrar un supuesto peculado, no lo ha logrado. “Las obras son visibles y los manabitas saben que en su provincia hubo reconstrucción”, afirma el analista.
Respecto al caso de los exconsejeros del CPCCS, Aguilar asegura que las acusaciones del Fiscal son infundadas y no constituyen delito. “Los exconsejeros del CPCCS discute los problemas del Estado con sus coidearios, lo mismo que Noboa hace con sus afines. En esto no hay delito alguno”, recalca.
La derecha y la narrativa del narcotráfico
Aguilar también critica a la derecha ecuatoriana, los medios de comunicación corporativos y los narcotraficantes, que, según él, están aprovechando la situación para beneficiar a Noboa. “Es sospechoso que el candidato presidencial siempre ponga sobre la mesa el tema del narcotráfico, ya que parece más una señal de que su gobierno tiene relaciones con el narcotráfico o al menos posee información que no quiere hacer pública sobre la exportación de droga en las cajas de banano”, afirma Aguilar.
Finalmente, el analista destaca que ni Luisa González ni la Revolución Ciudadana tienen vínculos con estos negocios. “Estos negocios están relacionados con la familia de Noboa”, concluye.
En cuanto a los operadores detrás de la campaña de Noboa, Aguilar resalta la presencia de la embajada de Estados Unidos, que, aunque ya no tiene fondos para financiar a los opositores «anticorreístas», sigue siendo un “elemento perturbador” que apoya a la derecha en Ecuador.
Aguilar concluye que, a tres semanas del final de la campaña y a una semana del debate, Noboa no tendrá mucho que decir, ya que carece de control sobre su propia campaña y no tiene respuestas ante los problemas del país. Esto será clave en el debate, donde los votantes podrán confrontar dos propuestas económicas, políticas y sociales muy distintas.